El tangram puede utilizarse en clase como material para estimular la discusión matemática.
Cada jugador dispone de un tangram. El jugador A, tras construir una figura matemática con todas o algunas de las piezas del tangram (por ejemplo, un triángulo o un paralelogramo), tiene que explicar a su compañero cómo lo ha hecho sin mostrarle en ningún momento la figura construida.